ROSARITO AL INSTANTE

TIJUANA.- Cuando enfiló su auto a gran velocidad, Juan Antonio Gutiérrez Calzada nunca se imaginó que se dirigía a la inevitable cita con la muerte.
Era la 1:30 de la madrugada cuando automovilistas que transitaban por la avenida Américas y Universidad de la colonia Buena Vista, en la rampa ascendente hacia la universidad, reportaron al 066 sobre un tremendo accidente vehicular.
Además de la presencia de la policía, solicitaron que acudieran los paramédicos de Cruz Roja, pensando que los ocupantes del auto podrían estar gravemente heridos.
En pocos minutos llegaron los grupos de emergencia, atendiendo a una persona que iba en el auto Volkswagen Pasta modelo 2006 color negro, y que salió disparado del auto, quedando tendido sobre la maleza.
Se trataba de Juan Antonio Gutiérrez Calzada de 45 años de edad, quien al ser revisado por los socorristas de Cruz Roja, éstos confirmaron que ya carecía de signos vitales.
De acuerdo al informe preliminar del perito de tránsito, el conductor iba a gran velocidad cuando su vehículo derrapó, brincó la banqueta y se llevó a su paso un cerco de maya ciclónica, dando varias volteretas hasta que el auto cayó hasta el fondo de un profundo barranco.
Cuando al auto se volcaba, el conductor salió disparado por el quemacocos, quedando entre la maleza y la pendiente, pero ya sin ninguna posibilidad de sobrevivir, debido a los golpes contusos que recibió en su cuerpo.
Al lugar fue requerida la presencia del Agente del Ministerio Público, quien dio fe de los hechos, ordenando luego el traslado del cuerpo al Semefo, donde se le practicaría la autopsia.