ROSARITO AL INSTANTE

MEXICALI.- El temido y despiadado narcotraficante y multihomicida Manuel Garibay Espinoza, a quien se le acusa de ser el autor de por lo menos 14 asesinatos, entre ellos el de tres agentes de la Policía, así como de encabezar una banda de secuestradores que realizó el plagio de cinco conocidos empresarios de esta región, fue detenido ayer en la zona rural de este municipio.

Fue en el ejido Mezquital de Valle de Mexicali donde se consumó el arresto por parte de agentes de la Policía Estatal Preventiva (PEP) cuando el jefe de la “Banda de los Garibay”, dedicada también al trasiego de droga, tripulaba un vehículo pick up. Al momento de su aprehensión, este hombre, que se había escabullido a agentes policíacos en por lo menos tres ocasiones anteriores, no portaba armas y tampoco era acompañado por algún pistolero.

Manuel Garibay Espinoza estaba convertido en el contacto de alto nivel entre el cartel de Sinaloa y narcotraficantes de Colombia, informó el director de la Policía Estatal Preventiva (PEP), teniente coronel Eusebio Villatoro Cortez, al dar a conocer oficialmente anoche los detalles de la detención, en una conferencia de prensa que ofreció en las oficinas de la PEP, ubicadas en el Centro Cívico, que permanecieron resguardadas por decenas de elementos policíacos y del Ejército mientras se tuvo en ese lugar al peligroso delincuente.

Conocido también como “El Meño” o “Alfonso Esparza Dueñas”, Manuel Garibay tiene 50 años de edad, y se le acusa de ser el responsable del tráfico de cocaína de Cali, Colombia, a México, para entregarse a la organización criminal dirigida por Ismael “El Mayo” Zambada García y Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.

En las primeras declaraciones de Garibay Espinoza a los agentes de la PEP, afirmó que su labor de contacto con las organizaciones colombianas las inició de manera directa, luego de que el 18 de marzo de 2009 la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), detuvo a Vicente Zambada Niebla, alías “El Vicentillo”.

Este peligroso narcotraficante y asesino de policías manifestó que estaba refugiado en el Valle de Mexicali, porque en Sinaloa se le “calentó” la plaza, en donde tenía el centro de operaciones.


Su historial


A principios de la década noventa, Garibay Espinoza fue identificado como el jefe de peligrosa banda del crimen organizado en el Valle de Mexicali, quien torturaba, incineraba y enterraba a sus víctimas.

En su historial delictivo, el detenido tiene activas tres órdenes de aprehensión, emitidas por Jueces del Poder Judicial en Baja California, por homicidio calificado y asociación delictuosa por hechos de 2003 y 2004.

El presunto delincuente es prófugo de la justicia luego de que en 1995 fue arrestado en el Condado de San Diego por distribución de cocaína y fue sentenciado; sin embargo, después fue liberado al convertirse en testigo protegido para ayudar en el arresto de los hermanos Ismael y Gilberto Higuera Guerrero, del cártel de los Arellano Félix.

La banda de Garibay Espinoza estuvo conformada por 28 integrantes, quienes se movilizaban en la zona Norte del Valle de Mexicali, pero ocho de sus miembros ya están detenidos.

Entre las acciones delictivas atribuidas a este sujeto se encuentra el secuestro en 1998 de los prósperos agricultores Gregorio Kodama y Pablo Melgoza; en 1999 plagiaron a Raúl Bejarano Escalante y Bernardo Magaña.

También están detrás de los asesinatos de Adel Durán Raygoza, Emiliano Cañedo Hernández y Cleofas Vargas Ruvalcaba.

Uno de los hechos que causó asombro en la población ocurrió en junio de 1999 en el Ejido Chiapas, cuando fue descubierto el asesinato e incineración de Lamberto Meza Beltrán, Guadalupe Núñez Meza, Manuel Meza García, Felipe Rodríguez García, Javier Ramírez, Manuel León Félix y Jesús Félix Sicarios, jóvenes originarios del Estado de Sinaloa.

En enero de 2001 se le atribuyó el secuestro del fumigador Gustavo Larios, quien fue asesinado y enterrado en un rancho de la familia Garibay.

El 2 de marzo de 2002, miembros de su banda asesinaron al comandante operativo de la Policía Municipal de San Luis Río Colorado, José Antonio Pineda Rodríguez.

El 22 de septiembre de 2002 asesinó al agente de la Policía Ministerial del Estado, Federico Alvídrez Viramontes, quien fue asesinado, calcinado y enterrado en un rancho en el Ejido Chiapas 3.

En junio de 2004 asesinó al comandante operativo de la Policía Ministerial, Humberto Armenta Vizcarra

Tomado del portal de noticias de EL MEXICANO...